Durante los últimos años de mi vida he escuchado a mi mamá conversar con personas de su misma generación, opinando que los jóvenes en la actualidad ya no quieren tener hijos. Por otro lado, he tenido la oportunidad de escuchar opiniones sobre la necesidad de responsabilizar a los hijos para que cuiden a sus padres en la vejez, centrando en ello la importancia de la reproducción.
Mucho se escucha hablar sobre los embarazos adolescentes en Guatemala. La precariedad con respecto a la educación sexual ha generado una desinformación durante años, esto sin importar si los jóvenes tienen acceso o no a la educación.
Gran parte de la responsabilidad recae en temas religiosos que se han encargado de censurar la sexualidad, viéndole como un tema tabú y no como parte de la naturaleza humana.
No está de más también hacer mención que la violencia sexual en niñas y jóvenes es un problema con mucho auge en nuestro país, Según datos obtenidos del Observatorio de Salud sexual Reproductiva (OSAR), para agosto del 2022, 1.106 niñas que comprendían una edad entre 10 y 14 años fueron violadas y se convirtieron en madres durante los primeros meses del año 2022. Niñas embarazadas que resultan siendo madres adolescentes por causa de desgarradores traumas.
¿Qué tiene esto que ver con la maternidad deseada?
En el año 2020 tuve el honor de conocer a una mujer con una historia desafortunada, fue violada por su padrastro en repetidas ocasiones.
Posteriormente quedó embarazada y dio a luz a una bebé siendo menor de edad. Para el momento del nacimiento, el personal del hospital fue quien realizó la denuncia y apoyó en acercarla a un grupo que ayudaba a mujeres en este tipo de situaciones. La chica mencionó que en muchas ocasiones deseó no haber tenido a su bebé y que incluso su presencia le provocaba mucho dolor.
Entender tanto la situación de la madre como de la hija es difícil, ambas desarrollando traumas y actuando en base a las herramientas que tienen a su alcance. Con esta chica se puede entrever que la crianza respetuosa es dura, deficiente o probablemente nula. Y aunque este es un caso en el que existió violencia, el suponer que los embarazos en adolescentes en los que no hubo abuso sexual, sino desinformación es de alguna forma ilógico.
Conforme voy convirtiéndome en adulta, también comprendo a la maternidad como algo distinto. La maternidad quizá no inicia en el momento en el que una mujer queda embarazada, sino en el momento en el que se toman decisiones pensando en el futuro e incluso cuando se es consciente de que no estamos preparadas para ser madres, ya sea porque no estamos económica o emocionalmente estables para darles una vida digna a futuras generaciones o porque nuestros planes son otros.
Así que, si en un futuro desean ser madres, pero no se sienten preparadas, también existe la alternativa de congelar óvulos, esto con el fin de conservar y hacer uso de los mismos en el futuro.
La maternidad tiene que ser deseada y también, se debe comprender que ser madre es mucho más que traer al mundo a un bebé.
Beatriz del Cid
Estudiante de Agronomía de la Universidad San Carlos de Guatemala. Amante de la música, la naturaleza, la justicia y las palabras.